Después de más de dos meses de cierre por un brote de gusano barrenador, Estados Unidos reanudará la importación de ganado vacuno, bisonte y equinos procedentes de México a partir del 7 de julio. El reinicio será gradual y con estrictas medidas de control sanitario para evitar nuevos focos de la plaga.
¿Por qué se cerró la frontera?
El 11 de mayo, el USDA suspendió el comercio de ganado mexicano tras detectar de nuevo el gusano barrenador, una plaga erradicada en EE.UU. desde los años sesenta. Este parásito se desplazó hacia el norte, afectando a productores y provocando bloqueos en la frontera.
Acciones conjuntas para contener el brote
Autoridades de México y Estados Unidos realizaron monitoreo intensivo, tratamientos sanitarios y liberaron más de 100 millones de moscas estériles cada semana, una técnica de biocontrol que ha permitido reducir significativamente los casos. Actualmente, se reportan solo 337 casos activos, representando apenas el 0.005 % del hato nacional.
Fechas clave de reapertura
Douglas, Arizona: 7 de julio
Columbus, Nuevo México: 14 de julio
Santa Teresa, Nuevo México: 21 de julio
Del Río, Texas: 18 de agosto
Laredo, Texas: 15 de septiembre
Cada etapa será evaluada antes de avanzar para garantizar las condiciones sanitarias en la importación de ganado mexicano.
Requisitos para la importación de ganado
Solo se permitirá la importación de ganado nacido y criado en Sonora o Chihuahua, o bien de ganado vacunado según los protocolos establecidos. Para los equinos, se aplicará una cuarentena obligatoria de siete días en instalaciones autorizadas y deberán cumplir con los requisitos de sanidad correspondientes.
Impacto económico de la reapertura
El cierre detuvo la exportación de unas 650,000 cabezas de ganado, generando pérdidas estimadas en 700 millones de dólares para el sector ganadero mexicano. La reapertura devuelve la certidumbre a miles de productores, permitiendo reactivar el comercio y estabilizar el mercado ganadero entre México y Estados Unidos.
Inversión en biocontrol para evitar nuevos brotes
Estados Unidos destinará 21 millones de dólares para modernizar una planta de producción de moscas estériles en México, incrementando su capacidad de 60 a 100 millones de moscas semanales. También se construirá una nueva instalación en Texas que podrá producir hasta 300 millones de moscas estériles cada semana, fortaleciendo la estrategia binacional para contener el gusano barrenador.
Conclusión
La reapertura escalonada de las importaciones de ganado mexicano bajo estrictas medidas sanitarias representa un paso crucial para recuperar el comercio ganadero mientras se mantiene controlada la plaga del gusano barrenador. Este avance traerá estabilidad al mercado, impulsará la recuperación del sector y protegerá a miles de productores que dependen de la exportación de ganado a Estados Unidos.
0 comentarios