Maestros de la Coordinadora Nacional de Trabajadores de la Educación (CNTE) realizaron este miércoles una jornada de protestas en el Centro Histórico de la Ciudad de México, como parte de un paro de 48 horas convocado para exigir cambios en materia laboral y de pensiones. Desde el mediodía comenzaron a instalar carpas y avanzar hacia el Zócalo capitalino, donde encontraron un fuerte cerco de seguridad.
La plaza principal permaneció blindada con vallas metálicas y un despliegue policial reforzado. Cuando los contingentes intentaron derribar algunas secciones del cerco para acercarse a Palacio Nacional, elementos de seguridad realizaron un repliegue utilizando empujones y gas lacrimógeno, lo que generó momentos de tensión en la zona. A pesar de ello, los docentes mantuvieron su postura y continuaron con el plantón en calles aledañas.
Entre las exigencias centrales del magisterio destacan la derogación de la Ley del ISSSTE de 2007, la eliminación del régimen laboral derivado de la reforma educativa de 2013, mejoras en las condiciones de jubilación y mayor presupuesto federal para educación y salud. La CNTE afirmó que estas demandas han sido ignoradas por distintas administraciones y que no retirarán sus acciones hasta abrir un diálogo “real y vinculante”.
Por su parte, autoridades federales señalaron que el uso de vallas y el operativo especial se establecieron para “proteger edificios históricos y garantizar el orden”. La presencia policial se mantuvo en calles como 20 de Noviembre, Madero, Eje Central y Corregidora, lo que provocó cierre de vialidades y afectaciones al tránsito peatonal y vehicular durante buena parte del día.
La CNTE advirtió que, de no resolverse sus planteamientos, podrían replicarse bloqueos y protestas en otros puntos de la capital y en estados del país. Al cierre de esta nota, el plantón seguía instalado en el primer cuadro de la ciudad, con intención de continuar hasta obtener respuesta formal del gobierno federal.
Foto via: Cuarta Plana
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